lunes, 31 de octubre de 2022

La huelga universitaria de París (1229-1231)

Como ya sabemos, el Privilegium scholasticum [más conocido como «Authentica habita»] lo promulgó el emperador Federico I Barbarroja en la dieta de Roncaglia (Lombardía), en noviembre de 1158, gracias a la notable influencia ejercida por los juristas de Bolonia; en aquel momento, se reconoció, por primera vez, la protección imperial a los maestros y estudiantes que viajaran en plena Edad Media por causa studiorum; pero, con el paso del tiempo, el privilegio del “studium” boloñés se acabó extendiendo a otras instituciones análogas del Viejo Continente, como París. A partir de ese nuevo marco legal que surgió a mediados del siglo XII podemos entender la decisiva huelga de la comunidad universitaria parisina, crucial para el posterior desarrollo de estos centros intelectuales en toda Europa, cuando durante dos años no se dictó ningún curso en la capital francesa y la mayor parte de sus alumnos y profesores secundaron la decisión y se retiraron a Orleáns [1], entre otras localidades, con los consiguientes perjuicios económicos para la ciudad [2]. Todos estos sucesos ocurrieron siendo regente de Francia la infanta Blanca de Castilla (madre del futuro rey Luis IX que, entonces, sólo contaba con quince años de edad).

Los profesores Ildefonso Adeva Martín y Javier Vergara Ciordia resumen aquellos acontecimientos a partir del testimonio de un testigo presencial: (…) Vicente de Beauvais [en referencia al monje dominico francés Vincent de Beauvais (siglo XIII)] se hizo eco de esta huelga en el “Speculum historiale” (lib. XXX, cap. 137). Su narración es viva; por los datos y la forma de exponer los hechos parece que los ha vivido muy de cerca. La huelga de la Universiddad de París comenzó a finales de marzo de 1229. En esa fecha, los maestros de París amenazaron con una huelga de un mes si no se castigaba al oficial de policía que había ordenado una carga contra los estudiantes, en la que algunos habían muerto y otros habían sido heridos. No habiendo conseguido su objetivo, en la segunda quincena de abril profesores y estudiantes abandonaron París con la intención de no regresar en un lustro. La controvertia se zanjó por la bula de Gregorio IX “Parens scientiarum Parisius”, de 13 de abril de 1231, considerada la primera carta magna de la Universidad de París. En ella se especificaban los derechos y deberes del canciller, obispo, estudiantes y profesores [3].


Así, por ejemplo, se estableció el derecho de suspensión de las clases por parte de la universidad si en quince días la autoridad civil no reparaba alguna ofensa hecha a un maestro o a un estudiante. Este derecho será usado con relativa frecuencia, como hemos visto, en la historia de la Universidad de París, pero frente a su uso excesivo y abusivo, finalmente será suprimido en 1499 por el rey Luís XII [4].

Citas
: [1] GÓMEZ OYARZÚN, G. La universidad a través del tiempo. Ciudad de México: Universidad Iberoamericana, 1998, p. 32. [2] BACIGALUPO, L. E. Aristóteles en París. Cómo la filosofía aristotélica en la Edad Media puso las bases de la modernidad. Lima: Pontificia Universidad Católica del Perú. 2022. [3] ADEVA MARTÍN, I. & VERGARA, F. J. “Vida y obra de Vicente de Beauvais”. En: BEAUVAIS, V. Tratado sobre la formación de los hijos de los nobles. Madrid: Biblioteca de Autores Cristianos, 2011, p. 12. [4] DECLERCQ, C. La enseñanza de la teología en las universidades católicas: contribución a la nueva evangelización. Madrid: Ediciones Universidad San Dámaso, 2018, p. 87.

No hay comentarios:

Publicar un comentario