Entre las colonias británicas de la Costa Este norteamericana, la Commonwealth de Massachusetts destacó por la trascendental importancia que se le otorgaba a las cuestiones religiosas, de modo que, por ejemplo, los miembros de su General Court –el órgano común que se estableció en 1629 para ejercer los poderes judicial y legislativo– debían profesar alguna confesión. A mediados del siglo XVII, la discrecionalidad de las decisiones que adoptaban sus magistrados se convirtió en una continua fuente de problemas con los colonos que, finalmente, se resolvió por consenso aprobando el Cuerpo de Libertades [Massachusetts Body of Liberties] de 1641, una singular síntesis donde se acomodaron tanto pasajes del Antiguo Testamento –condenando a muerte a quienes adorasen a otro dios que no fuese Dios Nuestro Señor [any other god, but the Lord God]– como referencias legales que eran dignas herederas de la mejor tradición legal británica que se inició con la Carta Magna de 1215 (aplicación de la misma justicia y la misma ley, derecho de petición ante las autoridades e incluso el habeas corpus); sin descuidar otras referencias pioneras, por ejemplo, la relativa a la protección de los animales destinados a usos domésticos, que no podían sufrir tyranny or cruelty de sus dueños.
Esa curiosa simbiosis convierte a este Cuerpo –compilado por el abogado inglés Nathaniel Ward– en una de las disposiciones más extraordinarias de su tiempo y en el segundo texto legal que los puritanos europeos adoptaron en Nueva Inglaterra, después de las Fundamental Orders of Connecticut que redactaron los habitantes de Hartford, Windsor y Wethersfield en 1639. En las siguientes décadas, la vecina colonia de Maryland aprobó su efímera y polémica Toleration Act de 1649; y después se adoptaron las Fundamental Constitutions de Carolina de 1669, redactadas por John Locke; y las Concessions ad Agreements of the Propietors, Freeholders and Inhabitants of the Province of West New Jersey, de 1677, atribuidas a William Penn.
Esa curiosa simbiosis convierte a este Cuerpo –compilado por el abogado inglés Nathaniel Ward– en una de las disposiciones más extraordinarias de su tiempo y en el segundo texto legal que los puritanos europeos adoptaron en Nueva Inglaterra, después de las Fundamental Orders of Connecticut que redactaron los habitantes de Hartford, Windsor y Wethersfield en 1639. En las siguientes décadas, la vecina colonia de Maryland aprobó su efímera y polémica Toleration Act de 1649; y después se adoptaron las Fundamental Constitutions de Carolina de 1669, redactadas por John Locke; y las Concessions ad Agreements of the Propietors, Freeholders and Inhabitants of the Province of West New Jersey, de 1677, atribuidas a William Penn.
GRACIAS, ME FUE DE GRAN AYUDA. LIKE!
ResponderEliminarA ti por consultar mi blog, Víctor. Pasa buen fin de semana
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